Según informaba la revista TIME hace 6 años, unos de los inventos del futuro más próximo sería el llevar un microchip de telecomunicaciones dentro de una muela, para así no tener que ir con el teléfono móvil encima. La idea se sostenía en un prototipo de dos investigadores ingleses los cuáles habían conseguido integrar en una muela del juicio un dispositivo capaz de recibir llamadas telefónicas. Al parecer el resto de la comunicación “la parte sencilla“ se hacía a través del cuerpo humano mediante onda de vibración y radio de baja frecuencia desde éste chip hasta el oído interno para poder comunicarnos correctamente.
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